Masculinidad hegemónica y prácticas violentas en varones universitarios

Dada la importancia en los temas de género es inverosímil realizar investigación considerando la relevancia social sobre este tema, sobre todo cuando se ha encontrado que el género tiene un rol sobresaliente en la vida de las personas que incide directamente en el bienestar del individuo “el rol de género es un aspecto tan importante en el ser humano, que merece estudiarse, para comprenderse la satisfacción que hoy se tiene con uno mismo” al cumplir o no con los roles de género (Aguilar, Gonzáles, González, Valdez. 2013, p.211) por ello es importante realizar investigación en este ámbito para identificar situaciones sociales y culturales que conllevan a una afectación en la salud mental de las personas que no cumplen con las exigencias impuestas al rol. El interés por realizar esta investigación surge en primer lugar del interés personal por desentrañar los paradigmas de los temas que tienen que ver con el género masculino, ya que ha sido un tema relevante y polémico en las últimas tres décadas, gracias a los movimientos sociales que han surgido a partir del feminismo, desde diversos sectores se han realizado acciones para visibilizar los temas y uno de ellos es cuestionar las prácticas de los hombres. Siendo muy relevante y de alto impacto en la sociedad, aunado por un interés personal por conocer los estereotipos que pudieran mantenernos en formas hegemónicas. En segundo lugar, se realizó esta tesis porque se pretende profundizar en la razón o razones de porque las formas de ser hombre, se tornan violentas para después dar lugar a una estrategia para resolver este problema. Partiendo de los supuestos teóricos de la investigación acción se construye esta intervención, es decir, por la necesidad de comprender de dónde vienen los comportamientos violentos se realiza en un grupo de reflexión diversos cuestionamientos para identificar, cuestionar y responsabilizarnos de las acciones que derivan de una masculinidad hegemónica. De esta manera, las prácticas masculinas hegemónicas se categorizan en: los juegos violentos, rituales de iniciación, iniciación al alcoholismo etc, han quedado plasmadas en la cultura de género, estas están tan arraigadas que muy pocos se cuestionan sus consecuencias. (Fernández, 2010). El seguir repitiendo estas conductas sin cuestionar sus efectos ha sido perjudicial para hombres y mujeres. Son relativamente nuevos los estudios e intervenciones que se han hecho para la reflexión sobre la masculinidad hegemónica, en comparación a los cientos de años en los que se han habituado las prácticas violentas de la masculinidad hegemónica, nos encontramos entonces con un verdadero reto.